Sí, todos lo sabemos. Por la boca muere el pez. Pero cuando algo lo
queremos para nosotros, cuando por fin tenemos delante lo que
estábamos buscando… ¡a todos nos ha pasado! La estrategia que
teníamos pensada, las frases que íbamos a decir, desaparecen cuando
abrimos la boca y el que habla es el corazón y no la cabeza.
¡Hay que saber negociar! Y esto no es sólo para empresarios. En el día a
día negociamos constantemente, con nuestros hijos a la hora de elegir la
ropa, con nuestra pareja al elegir una película, con los amigos para decidir
dónde pasar las vacaciones… Si no sabes utilizar “las armas” acabas
haciendo lo que quieren los otros.
Tengo que confesaros que en mí día a día como Personal Shopper
Inmobiliario, utilizo todas mis armas. Analizo todos los detalles, preparo
las posibles objeciones, planeo la estrategia que voy a seguir. Negocio
con la cabeza pensando en mis clientes.
Sin embargo al llegar a mi casa, todas esas armas desaparecen cuando uno
de mis hijos, con cuatro mimos o un “abrazo de oso” y ese “piquito de
oro”, quieren salirse con la suya, y mira que los veo venir… pero sin
darme cuenta dejo hablar a mi corazón y pierdo la partida.
Por eso una parte muy importante de mi éxito en el trabajo es saber
negociar. Ya lo decía Warren Buffet “Nunca temas pedir demasiado
cuando vendas, ni ofrecer muy poco cuando compres.” En la compra-
venta de un inmueble el vendedor representado por su agente
inmobiliario quiere vender por el precio más alto y el comprador quiere
comprar al precio más bajo.
Fíjate en la situación, por un lado el vendedor no está vendiendo un piso
está vendiendo su hogar. Este plus emocional, en muchas ocasiones,
incrementa el precio. Por otra parte el motivo de la compra de un piso, la
mayoría de las veces es emocional, por cambios también personales,
empezar a vivir en pareja, cambio de ciudad por motivos laborales, una
separación, aumento de la familia por la llegada de un bebe.
Siendo una compra emocional, necesitamos más que nunca una cabeza
fría experta en el mercado, que conozca la situación personal del
vendedor, si tiene prisa por vender, si tiene hipoteca, si es una herencia
etc. Es bueno saber cuánto tiempo lleva ese inmueble en el mercado, si ya
ha recibido ofertas y las ha rechazado. Todo esto y mucho más es lo que
hago como Personal Shopper Inmobiliario por mis clientes
No compres sólo. Yo soy Agente del Comprador tu Personal Shopper Inmobiliario.
“Quédate con lo bueno”
TRES PERSONAL
Tu Personal Shopper Inmobiliario de Confianza